Las aventuras erasmusianas de un trío de puristas

sábado, 28 de marzo de 2009

En general, rutina

Días de Vodka

Hola amigo de lo desconocido, vuelvo a sentarme un día más en esta desvencijada silla de madera virtual para contarte lo acontecido a lo largo de la última semana en mi (cada vez menos) ajetreada vida erasmus.
Dejando a un lado la vuelta a las clases (suceso inevitable y de ínfima importancia) podríamos decir que he vuelto a un ritmo erasmus razonable de salir un día si un día no.
Así pues el lunes y el miércoles hubo barras libres y el viernes una fiesta en no sé qué resi que se saldó con demasiado vodka y un par de bajas entre nuestras filas.
El resto del tiempo me he dedicado básicamente a no hacer nada, entre lo que se incluye jugar al pin-pon con mi compañero de habitación (Pablo, una estrella mundial). Pensé que podría ganarle con mi archifamoso saque liftado pero al final resultó que para ser un crack planetario de este deporte hay que darle a la pelotita algo mejor de lo que yo soy capaz.
Así, después de no devolver ni uno solo de los 8 saques decidí que quizá este juego no era exactamente como me lo había planteado y que requería algo más de concentración que el buscaminas.
En otro orden de cosas hemos empezado un torneo de F1 en la habitación, el primer gran premio (tras marcar pole y ser favorito) se ha saldado con mi descalificación (le di al botón que no era cuando estaba en boxes y me retiré de la carrera).
También me he apuntado a un equipo de fútbol que comienza su andadura este martes, claro está que no será como jugar con puristas pero algo hay que hacer para matar el tiempo no? El nombre del equipo coincide con el de un famoso bar gay de Varsovia (¿Casualidad?) y los componentes llevamos una vida de futbolistas de élite (al menos en lo que a salir y beber se refiere).

Atentamente, Alfonso.
PD Puristas en tercera plaza…
PPD Berlín a la vuelta de la esquina!

jueves, 26 de marzo de 2009

We Fon Tour. Capítulo 2: Cómo Fitness Killer y el Ninja del Amor comenzaron a forjar su leyenda

Días de Vodka y Champagne

Hola, hola, hola coleguillas de lo desconocido, me dispongo ahora a relataros los hechos del segundo día de la estancia en Varsovia ( y mi primer día).
Después de las romper todas las promesas que habían hecho el día anterior (que si me levanto para correr, que si unos abdominales), fons, bogus, pezons y quique vinieron a buscarme a el aeropuerto y carlos se quedó restorciéndose en la camita (se veía que no estaba q acostumbrado a nuestro ritmo.. pero la verdad es que para no estar acostumbrado se acabo portando como un espartano todos los días).
Déspues de barjarnos de un autobús anterior a la guerra fría, visitamos un monumento a los caídos a manos de los alemanes y con una estrella comunista muy grandecita. Ni que decir tiene que yo había salido en grenoble el lunes (ahora estábamos a miercoles) y todavía no me había recuperado. De hecho fue una de las noches mas locas de mi vida, donde me paso de todo, desde que me entrase una de 38 tacos hasta acabar en una casa de una venezolana (o era colombiana ?)enorme con otras dios tias y que me acabasen invitando a irme porque querian hacer cosillas (prefeferí no saber cuales).
Después de saciar un poco nuestro apetito cultureta, fuimos a nuestro gran hostal, y lo digo sin sarcasmos, ya que era barato, limpio, con internet, cocina e incluso lavanderia gratis. Alli me encontre a carlos, a el que se le veía un poco mejor de cómo estos me lo había descrito.
Las piezas ya estaban dispuestas: 4 colegas con ganas de liarla visitando a otro colega en un país lleno de pivones y con otra fiesta de barra libre esa misma noche.
He de decir que no hay documentos gráficos de esa noche en el Park, pero tampoco hace falta que documente todo... Empezamos en una cervecería donde nos sirvieron unas costillacas generosas y despues de pasar por la resi de fon y por el hostal fuimos ya al park (se llama así porque está en un parque basicamente). Fue allí donde conocimos a algunos de los míticos colegas de fons, como chevi, chavo o al gran pableras (desvirgador de chicas orientales durante unos días).
Y fue alli donde buhigas tuvo su primer altercado en el baño (y solo) con unos polacos, donde según cuenta empotró a uno contra la pared porque se había colado bogs y a éste no le había parecido bien y le estaba increpando (aunque alomejor de estaba dando los buenos días). Es cierto también que antes a bogs se le había colado mucha gente porque se había puesto un polaco a controlar la gente que entraba y la que no.
Y fue alli donde despues como de 4 pintas, me puse a hablar con una polaca que estaba un poco solitaria, y aun estando éstos en la misma sala (y con luz) no se pisparon que me lie con una... y así fue como comezó a forjarse la leyenda del ninja del amor, aunque ese día todavía no tenía la técnica muy depurada. Todo me fue bien con la chica hasta que fuimos a bailar la conga de gloria stefan y derepente se fue corriendo. Sería por mis increíbles movimientos de cadera? sería porque se había dejado el pavo en el horno? ya nunca de sabra...
Y alli fue donde probamos las dos clases de chupitos por excelencia. El kamikaze, que está bastante bien aunque nadie sabe muy bien que tiene y el mortal mad dog que fons ya ha citado alguna vez.
A la salida había nevado un poco y nos pusimos a hacer el capullo intentando hacer 360 (unos con mas fortuna que otros ,verdad carlos?) , que si bollos a pezones el cual intentaba evitarlos bajo la escusa de gritar como una nena y decir que era asmático, que si intentonas de hacer calvos y acabar destrozando los pantalones (verdad borja?), etc...
Bueno eso es todo por ahora gente, así son las cosas y así os las he contado (de las que me acuerdo).

jueves, 12 de marzo de 2009

Viaje al este

Días de Vodka

Hola amigo de lo desconocido, vuelvo hoy tras una agotadora semana que ha paseado mis pies por 5 países distintos, con 5 idiomas distintos y el mismo clima asqueroso en todos ellos.
Resultaría imposible para mí describir lo vivido en los países del este (de más al este quiero decir) en este viaje que me ha llevado a velocidad de crucero por algunas de las ciudades más sorprendentes que he visitado en mi vida, así que me limitaré a comentar en líneas generales la impresión que me han causado y dejaré los detalles técnicos (tampoco pasé demasiado tiempo en cada país así que si algún Ucraniano, Ruso, Letón o Lituano lee este post, lo entiende y no coincide con mi opinión es libre de dejar un comentario a modo de corrección)(todo sea dicho, si mañana entro y veo un comentario de alguna de las nombradas nacionalidades me quedaría bastante sorprendido)(por favor, no hagáis el chiste de comentar como si fuerais de alguno de esos países).
Nuestro viaje comienza en Varsovia un Jueves a las 12 de la mañana y por lo tanto con una resaca brutal de park, como no podía ser de otra manera, nos falló en el último momento uno de los componentes del equipo así que al final fuimos 4.
Tras recoger nuestros pasaportes con el visado ruso puesto (un visado que guardaré como si fuera oro) corrimos hasta la estación donde cogimos un tren (coche-cama, tren-litera, que cada uno lo llame como quiera…) que en sólo 17 horas nos habría llevado hasta Kiev.
Sólo comentar un pequeño altercado en la frontera Polaco-Ucraniana donde un militar grandote y con cara de pocos amigos se empeñó en decirme que el del pasaporte no era yo, lo que provocó inevitablemente que tuviera que sacar todos los carnés de los que soy propietario (incluido el del club vips, aunque ése no sé si sirvió para algo) para continuar la marcha.
En Kiev y tras una pequeña odisea para encontrar el albergue donde un par de simpáticos tipos (probablemente una pareja gay) nos enseñaron nuestras camas (debería decir tablones con sábanas), nos fuimos a ver la ciudad, muy bonita (encontramos un mercadillo donde vendían un casco de las ss, pero no era plan de ir cargándolo cuando entráramos en Rusia).
De Ucrania podríamos decir que es como una Polonia más polaca, el lenguaje incomprensible lo es aún más (y escrito en cirílico para completar la faena) las cosas son más baratas, las mujeres más rubias y los hombres más alcohólicos… Como en casa vamos.
Salimos de Kiev la noche siguiente rumbo a Moscú, esta vez sin problemas en la frontera (los soldados rusos son más serios) y llegamos a la capital soviética a las 7 de la mañana (una hora terrible) para descubrir que nuestro albergue era el elegido por parte de los mendigos de la ciudad (la parte que prefiere una cama sucia a quedarse tumbado cerca de la salida de aire de alguna línea de metro).
Pero tras el bajón del albergue recorrimos las calles moscovitas en busca de la plaza roja, no tardamos en encontrarla y en ella el mausoleo de Lenin, donde se halla momificado…
A pesar de que era la hora de abrir y de que estábamos en la puerta allí no se movía nadie y empezamos a temernos lo peor, así que preguntamos a un guardia que nos confirmó la peor de las sospechas cuando nos dijo que el mausoleo se encontraba en restauración y que el malqueda de Lenin ni siquiera se iba a levantar a decir aquello de “Aplastar el capitalismo!” Que es a lo que habíamos venido…
Cabizbajos y decepcionados la gran Moscú no tardó en recompensarnos con una manifestación de amantes del comunismo frente a la estatua de Marx, con sus banderas rojas con la hoz y el martillo y todo… Precioso…
Sobre Moscú sólo se puede decir que es una capital soviética con grandes monumentos soviéticos a héroes soviéticos, y que no es tan cara como dicen (el metro 50 céntimos, el menú big mac 3 euros y pico…)(Sí, fuimos a un Mc donald´s no al de la plaza roja porque allí había más gente que en el funeral de Estalin pero a otro cercano y si, tenía las letras en cirílico).
Abandonamos Moscú con el convencimiento de volver algún día y habiendo tachado ya unas cuantas cosas de la lista de cosas que hacer antes de morir.
Lo primero que puedo decir acerca de la llegada a San Petersburgo es que descubrimos con horror (una vez teníamos comprados los billetes a Riga) que desde Riga no existían trenes a Varsovia y los autobuses tenían un horario irregular y caprichoso… Con ese punto de emoción para el viaje (ya que era imperativo llegar el viernes a Varsovia) salimos a conocer la ciudad.
Dicen que San Petersburgo es la ciudad más bonita de Rusia y no decepcionó, aunque el frío empezaba a ser doloroso.
Poco que ver con Moscú y mucho con París en la ciudad donde más metros de río helado he visto en mi vida, mi trancazo empezaba a ir a peor por lo que las últimas horas en San Petersburgo las recuerdo de forma velada.
Para ir a Riga habíamos conseguido billetes de tercera clase, en un tren que se movía (En todas direcciones! Cómo es eso posible?! No se supone que estos cacharros van por vías?!) El viaje fue una auténtica aventura porque para completar el cocktail me había situado en la litera superior (en realidad era un tablón forrado de cuero un cuero que, por cierto olía raro, como a ruso rancio).
Sorprendentemente llegué vivo a Riga, decidimos allí dar un paseo por la ciudad en dirección a la estación de autobuses y coger billetes para alguno que saliera por la tarde, para ver un poco la ciudad y disparar un ak-47.
Cuando preguntamos en la ventanilla nos dijeron que el próximo autobús a Varsovia salía en 15 minutos y si no lo cogíamos teníamos que esperar 2 días al siguiente… Compramos los billetes y disfrutamos de otras 13 horas de viaje.
Pasé el viaje entre durmiendo, dormido e intentando dormir, así que no recuerdo demasiado, sólo que nos bajamos del autobús en Kaunas para poder decir que habíamos pisado Lituania.
Y este es el resumen de mi viaje por tierras soviéticas, un viaje que me ha servido para tachar un par de cosas en mi lista de cosas que hacer antes de morirme, y estar a punto de morir (que trancazo me cogí, se oían mis tosidos desde Vladivostok).

Atentamente, Alfonso.

PD Os dejo tres imágenes, he titulado la primera “Ánimo que aún podemos” la segunda la he llamado “Golpe bajo” y la tercera “Héroe nacional”
PDD Tras la eliminación de champions ya sólo me quedan los puristas y no hay crónica deportiva!
PDDD He cambiado mi foto de perfil por una que me traerá problemas…

lunes, 2 de marzo de 2009

We Fon Tour. Capítulo 1: Ya Vale

Bueno antes de comenzar a relatar ésta gran epopeya, me gustaría decir que el lunes de esa misma semana (2 días antes de partir), tuve uno de los días más raros de mi vida. Para empezar salí un lunes sin plantearmelo, vale, podéis pensar, quién no se ha marcado un ''desparramalunes'' alguna vez. Pero, ¿y si os dijera que acabé bailando con una tia de 38 años (de eso me enteré un buen rato después ) y que me pidió el móvil (que lo apunto en una libreta aunque tuviese móvil) y que luego acabé en la casa de una colombiana que no conocía de nada con una amiga mia y una amiga de mi amiga? Y si os dijera además que a pesar del estado de embriaguez de ellas, una de hecho de puso a mear en medio de una plaza, me invitaron a irme de la casa una vez nos habíamos pateado media ciudad para llegar a la casa? Podéis pensar, ¿a quien le podría pasar ésto si no es a Borja?

Bueno, después de ésta breve introducción voy a pasar a relataros, con la ayuda de Pezones y Bogs (http://lessonsofhate.blogspot.com/), lo que aconteció del 10 a 18 de febrero en Polonia. La idea de llamarlo We Fon Tour se la he robado a Pezones, pero como he visto que al final no la ha usado en su blog, la usaremos nosotros pues.
Como yo llegué al día siguiente, no puedo contar fehacientemente los hechos ocurridos el martes día 10, así que con permiso de Lessons of Hate (los detalles sobre el copywright se los dejaremos a nuestros abogados) voy a copiar un extracto y cito textualmente:


"Llegados al hostal nos llevamos una grata sorpresa: era limpio, nuevo, con internet, sala común, buenas duchas y lavandería gratis. Si, gratis, ni el hotel de Varadero tenía de eso y se supone que era todo incluido. Una vez instalados, Alfonso nos indicó que fueramos a su residencia a buscarle que aquella noche ibamos a tener una noche completita, y todo sin salir de un radio de 20 metros.


"Redecora tu vida"

Cenamos una hamburguesa en un garito que parecia salido de una pelicula de polis americanos: neones rojos a cascoporro (les encantan a estos polacos...), imagenes de Nueva York por las paredes y camareras extremadamente gilipoyas (no fueron capaces ni de entender Ketchup, coño). Una vez cenados, dimos un "paseo" de 10 metros a un garito que estaba casi en la misma estructura de la residencia de Alfonso, el Redmmont (o como se escriba). Era una barra libre por 20 slotis (de nuevo, o como coño quiera que se escriba), que te daba acceso a toda la cerveza que pudieras tragar hasta las 3 de la mañana. Imagináos, una barra libre de birra por unos 4 €.

Gonso
Carlos
Buhigas

"No, no es un puti, es un restaurante señora."

Nada más entrar pudimos observar que los puertas de Madrid tienen muchísimo que aprender de los de Varsovia. Un maromo de casi 2 metros de alto y 3 de ancho nos registró meticulosamente, amén de que yo creía que me queria echar por llevar chupa de cuero. En verdad fueron problemas de comunicación (era la primera vez que teniamos charla directa con un polaco) y solo queria que me abriera la chupa para registrarme mejor... Parecia que quisiera partirme la cara, vaya idioma del demonio.


Una vez dentro comenzamos a hacer planes para el día siguiente:

Diego: He, con calma con calma que yo estoy con medicación...-Dejando una cerveza vacia en la barra y pidiendo otra a golpe de lenguaje no-verbal- Oye, yo me suelo despertar a las 9 como un clavo. Si eso me pongo a hacer ejercicio y no os despierto...

Carlos: Si, me apunto a eso.

Buhigas: Eso eso, mañana prontito que así buscamos a Borja y hacemos turismo.


-----------------------------5 litros y medio de cerveza después---------------------------


"El tamaño importa"

Diego: aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaarghhhhhhhhhhhhhhhhh!

Carlos:ppffffffffffffCursivaffffffffffffffffffffffffffaaaaaaa YA VALE!

Buhigas:dkkkkkkkkkkkkkkkkddddddddddddddddddd

Alfonso: Si es que os lo dije...


Saliendo a tropicones del garito, si no recuerdo mal, llegamos al hostal y nos metimos extremadamente ebrios en la cama. Bueno, no todos, Carlos durmió abrazado a su primer retrete polaco.

Qué país.



Fué un poco antes de salir del Remmont, cuando Carlos soltó una de sus perlitas que perdurará para siempre en nuestra memoria:
'' Me gustaría subirme a la cabina del dj y decir: - Puede que no me entendáis pero... ya vale,eh? ya vale-''. Refiriéndose a la cantidad abrumadora de pivones polacos que había por metro cuadrado.






Para muestra... ¡un boton!









Bueno coleguillas de lo desconocido. Eso es todo por el momento. Espero tener tiempo mañana para escribir sobre el capítulo 2: "Cómo Fitness Killer y el Ninja del Amor comenzaron a forjar su leyenda"

Asi son las cosas y así os las hemos contado.
Un abrazoo

pd: Yo también envío un abrazo muy fuerte para un purista muy especial.